Con los egos revueltos así llegamos al 2010 los periodistas salteños. Pasó el Día del Periodista donde hubo poco para celebrar y mucho para reflexionar. Como siempre fue el día donde el espíritu de Mariano Moreno estuvo en la boca de todos -funcionarios incluidos- y en las tarjetas de salutación de muchos. Pero muy lejos de su ideario real. Aqui, los saludos, peleas, frustraciones, mentiras y videos repetidos…
El bien ponderado Moreno estuvo también en la boca de los discursos altos funcionarios, como la del inefable ministro de Gobierno Pablo Kosiner (Romero=Urtubey). Nada me causó más indignación este 7 de junio. Escucharlo repetir sus frases fue como una patada en las bolas.
Este funcionario de los dos últimos gobiernos siempre nefasto para el periodismo, se atrevió a citar a Mariano Moreno en la inauguración de la exposición de la “Imprenta de la Patria” en homenaje al Día del Periodista. Nada puede sintetizar mejor el cinismo e hipocresía. Más que un acto en La Casa de la Cultura, eso fue un “piquete policial”, porque estábamos rodeados civiles e uniformados que comían y vigilaban.
El ahora Ministro de Justicia y Derechos Humanos de Juan Manuel Urtubey, a juzgar por su trayectoria y accionar político en Salta, jamás podría referirse a la lucha por los derechos y la libertad. Pero lo hizo. Mucho menos abogar por el ejercicio del periodismo libre. Sin embargo, lo hizo. En fin… salí huyendo de ese ámbito cultural “tomado”. No por el vino que no había, sino por la guardia pretórica del Ministro.
A la papelera de reciclaje
Así pasé otro 7 de junio 2010, atribulado de tarjetas virtuales de políticos de turno con sus mensajes vacíos de verdad y contenido. Pura basura de frases irreales como exquisitos bocados para el tacho de la papelera de reciclaje de mi noble PC, tras el “delete” de rigor.
Los periodistas seguimos con las mismas problemáticas de siempre. Lo expresa un comunicado de APeS enviado ayer 7 de Junio. No tenemos acceso a la información pública, aumenta empleo en negro, se abusa de las pasantías, el manejo arbitrario de la pauta publicitaria oficial sigue engordando los bolsillos de los “periodistas” acomodaticios, hoy dueños de varios medios radiales y televisivos.
Los que amamos este oficio devenido a profesión porque hacemos del periodismo nuestra actividad principal, sobrevivimos el día a día: sin prebendas ni subsidios. Simplemente porque no comulgamos con esa prensa del encubrimiento, de la adulación, la complacencia, del mercantilismo… como es el estilo de varios publicistas (Peña, Grande, Matus, Villazón) que siempre se “borocotizan” para enriquecerse gracias al tráfico de información y publicidades con funcionarios, diputados, senadores o gobiernos de turno.
Paracaídismo periodistico
Siguen siendo tiempos difíciles para el periodismo libre (como también sostiene de la Asociación de Periodistas de Salta) para decir verdades, para publicar; trabajar, seguir en la lucha sin concesiones, con honestidad, aun a costa de los errores o las equivocaciones.
No muy lejos, otros conviven con la misma sucia politiquería, que acecha, confunde, embarra la cancha. Por ahí también aparece el oportunismo de los paracaidistas del periodismo alentados por la facilidad que hoy en día nos provee la red de Internet. Hoy cualquier perjil/la tiene una blog personal por hobby y le llama página periodística o portal, aunque copia o reproduce partes.
Aquellos que no generan mucho, opinan demasiado y escriben comentarios similares a pies de nota. En ellos vuelcan como en un inodoro lo que llaman “artículos de opinión” que va a parar a una su “portal” que en realidad se asemeja a una cloaca virtual que carece de servicio de camión atmosférico.
¿Cuáles son páginas clandestinas?
Pululan también muchas páginas digitales que son clandestinas. ¿Clandestinas? Sí, eso. Tal cual pasó en algún momento cuando se liberó el dial de la frecuencia modulada de las radios. ¿Cómo darse cuenta que son clandestinas? Muy simple. Un relevamiento de Salta Libre dio cuenta que de 10 de las supuestas “páginas informativas” de o sobre Salta, 8 son clandestinas.
Haga la siguiente prueba y vea si es cierto. Googlee “Salta”, encontrará decenas de “blogs” con pretensiones de página. Busque si adentro encuentra un Staff de periodistas con nombre y apellido, columnistas, un editor responsable, un teléfono fijo, celular o una dirección donde funciona la oficina de redacción.
En las páginas truchas o clandestinas, se suben, se pegan los partes tal cual vienen. Nadie “cocina” los materiales (cocinar= darle forma periodística). Aprendieron lo fácil que es tener una pagina Web, copian el diseño y ya se autotitulan periodísticas.
Si alguno de los requisitos sugeridos no se encuentra o no existe, usted está frente a una página clandestina o de información “trucha”. Haga la prueba y si quiere empiece por www.saltalibre.net y siga por www.calchaquimix.com.ar, cultura y espectáculos, que pertenecen a “J.A. Comunicaciones”. En la Web, la primera ya tiene 6 años y la segunda este 2010 cumple 8 años.
Para mi, pasaron 31 años
Se fue otro día más del periodista con una noche de festejo amigable que me permitió recordar que ingresé al mundo del periodismo en viejo El Tribuno, como un trabajador de prensa un abril de 1977 (en los albores de la dictadura militar), para quedarme como empleado efectivo desde 1979. Un año difícil para la gente común, para el país y sobre todo para los jóvenes. De varias caídas “en cana” a la salida de los boliches o cines por averiguación de antecedentes. Increíble, pero ya pasaron ¡31 años!
La pasé como todos los periodistas, rcordando viejos compañeros que no están, renegando y opinando como en realidad nos gusta pasarlo. Un día agitado de puntos de vistas encontrados, de debates, de varios agasajos políticos; también institucionales, como el de la UNSa. Mal organizado desde un principio y gracias a la cordura, levantado a tiempo.
Fue un día también de desplantes y también porque no, de arteros ataques de dos frustrados profesores que juegan a ser periodistas. Ambos con una salsa de egos revueltos en su cabeza, con ansias de protagonismo desmedido.
Mi colega Marta César me pide nombres. ¿Le contesto? ¿Para qué? ¿Para victimizarlos? ¿Para que jueguen su papel más preferido?. Ya sabes, quieren figurar. Me niego primero, pero luego cedo a la presión para dedicarles mis últimas líneas. Al fin de la nota que de tan larga seguro, nadie leerá y quedará para los interesados del chusmerío barato o puterío. Porque es así y no da para más…
Contestar públicamente
Nombre, apellido y profesión. Uno de ellos es mi ex amigo Miguel Brizuela, de profesión docente (aunque no le guste lo que eligió estudiar), abandónico, devenido a periodista en sus tiempos libres por mi incansable insistencia. Un discípulo mío dilecto (mal que le pese) que algunos años ayudó al crecimiento de Salta Libre, pero que abandonó por decisión propia. Y como él no estaba, lo que construimos juntos, quiso destruirlo.
Retirado de su hobby periodístico reapareció en el “blog” (que no pasa la prueba de la página clandestina) con el diseño copiado de Salta Libre. Su nombre está detrás de este escándalo del frustrado homenaje a los periodistas de la UNSa. El había sido elegido como expositor por su amigo el profesor Rubén Correa, que no sabia que estaba retirado hace años.
Como no tenía tiempo por su labor de docente, armó el quilombo ofreciendo su puesto nada menos que a su colega Romina Chávez Díaz, también de profesión docente. Su nombre desde un principio figuraba al lado de Jorge Villazón. Ella primero saltaba de contenta. Luego cuando se suspendio o la bajaron, sabía que iba a protagonizar su mejor papel: “Nunca al lado de Villazón!”
Como a Brizuela siempre le dio lo mismo “la chicha que la limonada”, envió al frente periodistico a este curioso caso de mujer orquesta o múltiple. Porque además de docente es: directora de teatro, actriz, iluminadora, escritora, guionista, dramaturga y si no me equivoco está cerca de ser médica, abogada y sigue la lista… de auto bombos varios. Como nunca está conforme ahora también se autotitula periodista. Lo que en síntesis se dice “carne de diván”.
El “Profe” de las horas libres
Mi ex amigo Brizuela aparece en escena como su acérrimo defensor. Ayer emergió del ostracismo para decir que utilizo APeS y la radio para atacarla públicamente (¿…?). ¿Acaso prefiere que la ataque en forma privada? No! ¡Paso! Por algo el profesor Correa levantó el homenaje. Muchas razones le hicieron darse cuenta que no era ético seguir adelante con los expositores, medallas y demás. El miércoles 9 de junio solo se hace el seminario.
Pero alguien dijo: ¡Langosta! y saltó. Es fue mi ex amigo, el “Profe” Brizuela. Al que todos sus adolescentes alumnos quieren mucho, porque su nombre en la grilla de sus horarios de secundaria, significa “hora libre” y a fin de año “aprobado”.
Miguel, cuando se refiere a mi persona, lo que para él ante era blanco, hoy es negro. Sus defensas y ataques hacia mi, fueron graciosos, desopilantes y siempre carentes de sentido lógico y ético. (Ya leerán más abajo por qué).
En las tres últimas líneas que ya nadie leerá finalmente opino que su pálido papel de esta grotesca parodia que se repite, es la de de defensor de pobres e inocentes. Sus argumentos carecen de coherencia en la história que nos tuvo como asociados.
Para mi son nada más que un bonito ramillete de cierto prestigio y credibilidad que afanosamente tira al barranco sus objetivos de profesor de “lógica y ética”, de colegios secundarios. Tamaño favor les hará.
A pesar de todo, desde aquí deseo que todos hayan pasado un feliz día del periodista. Y los lectores sabrán entender que la función elemental de un periodista no implica necesariamente ganarse amigos…