El expresidente de Francia Nicolas Sarkozy (2002-2012) está en prisión en París para cumplir una condena de cinco años, que aún puede apelar, por un caso de asociación delictiva en el financiamiento de una campaña.
Sarkozy fue sentenciado a cinco años de cárcel por conspiración criminal por su papel en un plan para financiar su campaña presidencial de 2007 con fondos de Libia a cambio de favores diplomáticos. La Fiscalía lo acusó de haber recibido millones de euros del fallecido dictador libio Muammar Gaddafi para la campaña que lo llevó al poder.
En septiembre, un tribunal declaró a Sarkozy culpable de asociación delictiva en una conspiración entre 2005 y 2007. Lo absolvió de otros tres cargos, entre ellos corrupción pasiva, financiación ilegal de campañas y encubrimiento de malversación de fondos públicos.
«Esta mañana encierran a un inocente», escribió minutos antes en la red social X el exmandatario de 70 años, quien denunció un «escándalo judicial» y un «viacrucis». «La verdad triunfará», agregó.
Su condena estuvo acompañada de polémica. El también marido de la cantante Carla Bruni cuestionó que el tribunal ordenara su ingreso en prisión sin esperar al resultado de su recurso. El juicio en apelación debe celebrarse en los próximos meses.
La cuestión de la ejecución provisional es «un debate legítimo» que debe llevarse a cabo «con calma», declaró este martes el presidente, Emmanuel Macron, a quien la oposición de izquierda criticó por reunirse con su predecesor el pasado viernes.
Una de la prisiones VIP de Francia
Del Elíseo, pasando por Trípoli, hasta una cárcel en Montparnasse. Televisión, refrigerador y teléfono en la celda: los beneficios que tendrá Sarkozy en la famosa prisión de La Santé. El expresidente francés estará en la misma prisión que otros criminales famosos de la historia, como el poeta Guillaume Apolinaire y el novelista Jean Genet.
Ubicada en la “rive gauche”, la mitad al sur del Sena en París, la Maison d’arrêt de La Santé es una de las prisiones más conocidas de Francia, y una de las “VIP”, que ha albergado a distintas figuras de la política y el arte. Siendo Sarkozy el primer expresidente francés en entrar a la cárcel, se le tendrá en un aislamiento total para evitar problemas con otros internos.
Desde el diario Le Figaro destacan que la prisión de Sarkozy es una “primera vez histórica” en la Unión Europea: “Si presidentes como Lula en Brasil o Jacob Zuma en Sudáfrica han entrado a prisión después de su mandato, ningún exjefe de Estado de un país de la Unión Europea había vivido esa suerte hasta ahora”.










