Jean Michel Bouvier (66), el padre de una de dos las turistas francesas asesinadas salvajemente en julio de 2011 y cuyos cuerpos fueron hallados abatidos a tiros en las adyacencias de la zona de El Mirador de San Lorenzo -el punto final de uno de los más visitados circuitos de ecoturismo de la provincia-, cuestionó, en un diálogo con el autor de esta nota, la investigación del caso realizada por el juez de Instrucción Formal 1, Martín Fernando Pérez (actualmente ascendido a camarista). “Es de una pobreza absoluta y plagada de cabos sueltos”.
Bouvier manifestó en una extensa charla, que fue traducida por un colega francés, Juan Carlos Chatard, director del medio francés TV Corse, quien se halla escribiendo un libro colateral al tema y que piensa publicarlo cuando se conozca la sentencia del juicio relacionado a las chicas parisinas y cuyo eje central es el comisario Néstor Piccolo, ex jefe de la Brigada de Investigaciones de la Policìa de la Provincia, quien llevaba a cabo las pesquisas del caso y quien, supuestamente, se suicidó a los cuatro meses del hecho.
El caso de Píccolo es importante puesto que durante las audiencias de este juicio, iniciado hace tres semanas y que concluirá en el primer día de la tercera semana de mayo, se conoció un informe de su autoría en el que asegura que las cosas no están siendo limpias y que han habido sendos plantazos de armas y proyectiles en este caso, tendientes, obviamente, a poner punto a las tareas investigativas fuese cual fuese la realidad.
Al respecto, Chatard, adelantó que su obra llevará por título “Argentina, autopsia de dos asesinatos” y está basada “en el trabajo del comandante Píccolo”.
Durante la entrevista, realizada el lunes 14 de abril, en la zona de El Mirador de San Lorenzo, bajo una tenue pero pertinaz llovizna, Jean Michel, vestido con una campera roja, pantalones negros y zapatillas amarillas, fue preciso. Aseguró que ambas jóvenes fueron ultimadas y sometidas en otro lugar; manifestó tener la absoluta certeza de que las víctimas sufrieron el ataque de muchas más personas de los que actualmente se encuentran como imputados principales del hecho y -entre otras cosas-, dijo tener certeza de que una mujer que aparece en una de las imágenes fotográficas rescatadas de la cámara de una de las estudiantes asesinadas y cuyo nombre y datos generales se hallan en una zona de misterio, es francesa, que reside en Salta y que estuvo con su hija y su compañera fallecidas, en el hotel donde se alojaban, el día antes de su supuesta muerte.
El lunes 14 de abril, a partir de las 9.40, los jueces que cubren el crimen, Angel Longarte, Bernardo Ruiz y Carlos Héctor Pucheta, iniciaron, junto a policías y periodistas, la ascensión a El Mirador de San Lorenzo, para una inspección inocular del lugar donde se produjo, eventualmente, la violación, torturas y ejecución de Cassandre Bouvier (29) y Houria Mounmi (21), estudiantes de sociología de la Sorbona, cuyos cadáveres fueron hallados por un par de turistas de Chaco y de Buenos Aires, en la tarde del 29 de julio de 2011, en una zona inaccesible, aunque situada pocos metros de El Mirador, una cuasi circunferencia sin vegetación alta, situada en un plano inclinado irregular, a 1550 metros de altura sobre el nivel del mar, desde donde se divisa parte del Valle de Lerma y la inmensidad del sistema selvático pedemontano, una yunga de una flora y fauna novelescas.
Por el doble crimen y como autores materiales del hecho se hallan acusados Gustavo Lasi, un empleado de la Secretaría de Medio Ambiente; un gaucho local, Santos Clemente Vera; y un albañil, Daniel Octavio Vilte Laxi.
También se encuentran en el banquillo Omar Darío “Pajarito” Ramos y Antonio Eduardo “Chato” Sandoval, quienes lo están por encubrimiento, al haber sido partícipes de un extraño pasamanos de una carabina de propiedad de Walter Laxi, el padre del más comprometido de los detenidos, ex empleado de la empresa que explotaba el circuito de ecoturismo de la Quebrada de San Lorenzo y quien era el propietario del arma, de la cual salieron los disparos que acabaron con la vida de Cassandre y Houria.
Walter, en un afán supuestamente encubridor, recibió el aparato, calibre 22, de manos de su hijo, quien, de acuerdo al expediente de la instrucción, le dijo que había matado con ella al perro de un vecino poderoso. Walter, se la entregó a su hermano Enrique y este, continuó el “pasamanos” con Pajarito y el Chato. Lo real es que todos, son íntimos amigos, como familia, desde hace generaciones.
El martes 15 de abril, Walter Lasi, fue convocado por los jueces a declarar y se abstuvo. El día anterior, Jean Michel Bouvier, dijo a este periodista: “La persona que sabe todo, es Walter Lasi. El es quien puede decir quiénes participaron de este caso. El es la clave.”
“Aquí, como principales responsable -señaló el padre de Cassandre-, figuran tres personas, pero las pruebas aportadas por Martín Pérez sobre Vera y Vilte Laxi son muy pobres. Hay más participantes en este hecho y no son estos dos que he mencionado. Si Lasi decide a hablar se puede saber la verdad. Además, nunca se investigó a la mujer de anteojos que parece en una de las fotografías, tomadas en San Lorenzo… ¿Por qué? Yo he hecho mis averiguaciones y puedo decir que ella estuvo con las chicas en el Hostal del Cerro, donde se alojaban, frente a María Rosa Gómez Mollet, en su oficina, utilizando la red Internet, el último día en que se las vio en Salta Capital. Lo que he averiguado es que es francesa, que reside en San Lorenzo y que nadie la ha buscado”, señaló Bouvier. En cuanto al lugar del crimen , en las inmediaciones de El Mirador, fue claro: “no fue aquí”.
Las próximas audiencias de este juicio prevén testimonios clave: el 28 de abril, desde Madrid, hablará María Rosa Gómez, la ex dueña del Hostal del Cerro, que se fue de Salta antes de que se cumplieran 48 del encuentro de los cadáveres. Pocos antes, el 24, testimoniará el profesor Corach, titular del Servicio de Huellas Digitales Genéticas de la UBA, quien aseguró que en los cadáveres había restos seminales, en las cavidades vaginales y anales de ambas víctimas, de Gustavo lasi y epiteliales de Santos Vera. También será interrogado el Dr. Raimondi, de la Fundación Favaloro, quien coincide en lo que se refiere a los rastros de Lasi pero desconoce que halla evidencias de la presencia de celulas de Vera en los despojos.
Y en esto de los ADN, hay una tercera prueba terrible que deja con la eventualidad de un final abierto a este caso que ha conmocionado a Salta, Francia y al mundo: un escáner autópsico realizado en Francia por orden del juez del Alto Tribunal de París, Patrick Ramael, concluyó en que en los restos de las chicas, hay evidencias seminales de Lasi, no así de Vilte Laxi ni de Vera, aunque agrega un dato misterioso, que pareciera confirmar la hipótesis de Jean Michel Bouvier: en ambos cadáveres, se halló ADN de dos mujeres y un hombre desconocidos.
- Informe: Juan Antonio Abarzúa Rojo
Periodista invitado.
Fotos: Nuevo Diario de Salta