En un país donde las monjas no son monjas, un convento no es un convento y todo se sigue por capítulos en televisión, parecería que nada puede sorprendernos. Las declaraciones de Jesús, un vecino, llamando a la policía para que vengan, porque había un tipo a las tres de la mañana tirando bolsos y entrando a un convento, fue derivando en otra historia.
Las monjas cuando fueron citadas a testificar dijeron que esperaban la llegada de José López. Una de ellas se llamaba María. Las cámaras de seguridad mostraban al ex secretario de obras públicas entregando los bolsos y dejando un arma en el piso, como si apoyara una silla. Se lo veía demasiado tranquilo. Después todo continúo en algo más mediático: su abogada defensora cumplió su sueño. No defender al acusado, sino llegar al bailando y retomar su carrera de “bailantera hot”.
A todo esto nos acostumbran y nos divertiría si esto no tuviera otro trasfondo. Por eso no es una película de Almodovar. Uno de los abogados más mediáticos, que fue junto a un fiscal (que anduvo por Santa Cruz seguido de cámaras que nos transmiten minuto a minuto un allanamiento) a ver el partido de la Copa América en EEUU, ha dicho en uno de los tantos programas que va como invitado, que quedan como ciento cincuenta situaciones que serán llevadas a juicio, acompañado de cámaras de TV.
En esto consiste el desgaste final de la cacería de los K. Estos guiones tienen un fuerte tufillo a venganza. Una clase política denuncia (Carrió, Stolbizer, Ocaña), el partido judicial interviene y todo sigue en cadena nacional por los medios, Así como la justicia siempre es oficialista (lo siguen demostrando en que son los mismos jueces federales que estaban en el gobierno anterior, y que había causas que tenían más de 8 años y ahora- después de diciembre- se activan) sucede lo mismo con algunos políticos.
Hablamos de los que fueron votados por un frente (FPV) que representaba otro modelo económico al que existe actualmente. Ese es el otro desgaste que esperan con la persecución a la ex mandataria. El límite será no meterla en prisión, ya que si lo hicieren, la empoderarían aún más. Ahí, muchos de los militantes jóvenes, no se quedarán mirándolo por TV. El juez que la cita, ahora lo entiende mejor. Lo que espera el macrismo es que continúe la diáspora peronista, que sigan dividiéndose. Si sus ex empleados de la banca financiera (léase ministros de hacienda) logran controlar algunas variables de la economía y hacerla aguantar (en este modelo de entrega), a través de nuevos endeudamientos, estos lo utilizaran para repartirlos entre los gobernadores, los intendentes (del conourbano de Bs As), y los sindicatos, para las elecciones del año próximo. Los diputados y senadores provinciales tienen sus compromisos que solo pueden solucionar con la caja que les baje el oficialismo.
La «patria panelista» ’que nos brinda tanta confusión todas las noches por América TV, ahora cumple otro rol. No solo quieren ser los fiscales acusatorios de los K, sino que hoy se quieren constituir como la moral de la nación. Por eso se ofenden rápido cuando algún invitado les recuerda ese lenguaje de odio “gorila”que derraman. Por otro lado el holding de Clarín/ TN, que sigue fogoneando, desde el caso Nisman, pasando por las historias de las bóvedas, y la repetición constante de cómo contaban dinero, nunca mencionan lo que sabían (junto al diario La Nación) sobre las cuentas en el exterior de los actuales gobernantes. Como se dice: iban por una cuenta en Panamá de los K y terminan encontrando una cuenta M.
Lo que tienen en común estos medios es que nunca dicen de dónde salen determinadas cámaras (videos que vemos a repetición y que los panelistas nos explican según sus intereses). Quienes han vuelto al rodeo, son los servicios de inteligencia.
Si a la política la han judicializado, ellos han retornado con todos sus archivos. La ex SIDE también siempre fue oficialista: trabajan para el poder ejecutivo y para el judicial. Pocos dirigentes del kirchnerismo han realizado la autocrítica de haber dejado ‘al zorro para cuidar el gallinero”.
Los servicios siempre tenían carpetas de políticos y solo servían (o sirven) para seguirlos y luego extorsionarlos (con algún/a amante, una borrachera o algún negocio turbio). Apenas destituyeron al jefe de la SIDE (en el inicio de 2015) comenzaron a salir videos, escuchas, redes y toda una serie de elementos que les llegan a algunos periodistas. Demasiadas coincidencias en muchos hechos. Es un poder del Estado que siempre se manejó en forma semi- autónoma, funcionando cada vez más privatizado y que aún no sabemos si se les ha escapado de la mano (funcionando como empresa paralela).
El partido de la internacional republicana (léase los que integran «Cambiemos», que tiene un gran apoyo financiero, porque debe ser el modelo para Latinoamérica, después de tanto populismo como dicen en el norte) ha hecho convenios con el Tío Sam, por drogas en la frontera y todo lo que consideren terrorismo en la región. Compraran radares, aviones robotizados, informática de alta tecnología (software) que va a ser otro gran negocio para vender protección (más cámaras en las calles) con el enriquecimiento de los intermediarios locales. Guardar información (carpetas) para luego sacarla en otro cambio de gobierno, también es brindar otra forma de seguridad. Eso los jueces y los políticos lo saben.
- Lic. Carlos Liendro
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