El conflicto por Cosquín 2014 sigue. Se apagaron las luces queda la polémica como todos los años. Y este no fue la excepción. El homenaje a Eduardo Falú tuvo un mal sonido y fue interrumpido. A la queja de Juan Falú ahora se sumaron Teresa Parodi, Peteco Carabajal, Rojas, Los Tekis y Liliana Herrero. Varios dijeron que no volverían y apuntan a un negocio que “no respeta el género, desnaturaliza la escencia y la calidad”.
Ahora se quejan Parodi,
Peteco y Liliana Herrero
Esta semana Liliana Herrero publicó una reflexiva nota sobre Cosquín en Página/12, titulada “Girar el Plato”. En la revista “Veintitres” se despacharon duro Parodi y Peteco Carabajal. Falú emitió un comunicado titulado “Caos-quín” en el que fue duro y dijo sus verdades.
“Es así este Caos-quín, taquillero, popular, de altos volúmenes para alimentar efusividades. La misma técnica usan los comerciantes poniéndoles música tecno a los laburantes para que no se duerman. Pienso: para qué carajo vengo si ya sé cómo es. Me respondo: es mi desafío”.
Luego de nueve noches, el tradicional Festival de Cosquín terminó y a la hora de hacer el balance fueron varios los artistas que dejaron en claro su malestar debido a diversas decisiones de la organización. Escándalos, maltratos y hasta golpes es lo que queda luego de bajar el telón del escenario Atahualpa Yupanqui en la plaza Próspero Molina de la ciudad cordobesa.
Sobre la edición número 54, Freddy Martino, referente de la comisión que organiza el festival, recibió dos trompadas en la cara de parte de un músico que estaba descontento por cuestiones de la preparación. Todos vieron el incidente con Juan Falú la quinta noche. La gente también reclamó por los horarios de los artistas centrales.
Liliana Herrero no se quedó atrás. En diálogo con Veintitrés aseguro que “nunca me gustó el estilo de Cosquín. Empeoró enormemente. Con personajes como Marcelo Simón –presentador– que dijo que yo le calenté la cabeza a Falú. Es tan bajo y pobre. Además de misógino, me parecieron vergonzosas sus declaraciones. No volvería jamás a Cosquín”, disparó.
Pero ellos no fueron los únicos que juraron no volver a pisar la plaza Próspero Molina. Jorge Rojas sostuvo que el festival “necesita una persona detrás del escenario con carácter fuerte que pueda respetar a cada uno. A mí no me respetaron el arreglo”. Los Tekis fueron otros de los damnificados por el horario. El grupo dijo en un comunicado que “nos parece una falta de compromiso y profesionalismo, que no es acorde a la historia de tamaña fiesta popular”.
Teresa Parodi dijo “es hora de refundar Cosquín”. En diálogo con esa revista manifestó que “de haberme enterado de lo de Herrero y Falú, no hubiese subido al escenario. El Cosquín de antaño dejó de existir. Hay una música que no está siendo visibilizada. Todos los años tengo una contradicción con Cosquín: quiero ir y no quiero”, concluyó.
Peteco Carabajal fue más allá: “Cosquín adoptó la modalidad de meter artistas desconocidos que consiguen sponsors para pagar la actuación. Es lo que vende y eso desnaturaliza la esencia y la calidad. Lo que se vio por televisión fue patético. Está en decadencia como forma de festival. No sé si voy a volver”, aseveró.
Del lado de la organización, Martino aseguró que “lo que dice Peteco no es así. El problema de los artistas consagrados es que quieren hacer un show demasiado largo. Sería cuestión de sentarse a hablar. El Chaqueño Palavecino dijo que no volvía y volvió. La razón no está de un solo lado”.