Tengo la profunda certeza que el peronismo no se opone al peronismo. Presentarse como alternativa “en el” peronismo es una cosa y presentarse como alternativa “al” peronismo es otra muy distinta. La responsabilidad que le compete a la oposición, al menos, es
advertir que esta película ya la vimos.
Según Wikipedia, una “película cinematográfica: “es una secuencia de imágenes fotográficas tomadas con una cámara, y presentadas mediante un proyector. Empleando una velocidad de sustitución de imágenes superior a 18 fotogramas por segundo, crea en el ojo humano la ilusión de continuidad, sin interrupción entre cada fotograma debido a la persistencia retiniana.
- Foto 1: Menem y Solá. Foto 2: Duhalde y Solá. Foto 3: Kirchner y Solá. Foto 4: Macri, De Narváez y Solá.
- Foto 1: Menem y De Narváez. Foto 2: Duhalde y De Narváez. Foto 3: Macri, De Narváez y Solá.
- Foto 1: Menem y Macri. Foto 2: Duhalde y Macri. Foto 3: Sobisch y Macri. Foto 4: Macri, De Narváez y Solá.
Conclusión, la foto se transforma en una película. Que es la repetición de fotos en una secuencia a una velocidad determinada. Por ello el ojo humano no percibe que la secuencia se construye con muchas fotos circulando y proyectándose a gran velocidad. Sin embargo, la responsabilidad que le compete a la oposición, es, al menos,
advertir que esta película ya la vimos.
Primera posición, y lo digo textual porque es importante que no se me malinterprete. Que el peronismo se junte y tenga algún tipo de organización con reglas de juego y diálogo entre distintos referentes de ese espacio es genial. ¡Al fin se va ordenando el sistema político argentino de una vez por todas!
Segunda posición, tengo la profunda certeza que el peronismo no se opone al peronismo. Presentarse como alternativa “en el” peronismo es una cosa y presentarse como alternativa “al” peronismo es otra muy distinta. Tercera posición, así como valoro y congratulo el ordenamiento del peronismo.
También estoy absolutamente convencido de reunir nuevamente a la gran familia radical. El radicalismo es el partido central de la alternativa “al” peronismo. Vale la pena aclarar a estos efectos, que no me considero “anti peronista” porque no construyo mi identidad en la alteridad que me brinda el otro. Sino que simplemente me baso en nuestro propio pensamiento.
Así como pensaba Moisés Lebensohn, “doctrina para que nos entiendan y conducta para que nos crean”. Al fin y al cabo, esta película crea la fantasía retiniana de continuidad y de cambio dentro de la continuidad.
Pero no nos confundamos, ni confundamos a la ciudadanía. Porque bien sabemos que las películas se terminan en algún momento, y si
son demasiado largas, la gente se va del cine. Quizá, y si logramos juntarnos todos los que ya nos cansamos de ésta, podamos proyectar otra historia.
- Presidente del Instituto Lebensohn.