El argentino Quino acaba de lanzar el libro “La aventura de comer”, un texto con trasfondo político y social. El argentino se pregunta ¿por qué no hay caricaturas sobre Fidel Castro?. Las declaraciones del escritor y dibujante Joaquín Lavado publicadas por la revista Noticias, tuvieron repercución en el diario El Nacional de Venezuela. Sostuvo que esta “preocupado” por “todo esto de (Hugo) Chávez, de Evo Morales” y por cómo gobernará Argentina la nueva presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
El creador de Mafalda y otros famosos personajes dijo a la revista argentina Noticias, que a quienes ve “un poco más seguros” son a la presidenta chilena Michelle Bachelet y al brasileño Lula Da Silva.
“Los demás están ahí, sin saber en qué anda la cosa”, dijo Quino desde Madrid, donde se encuentra actualmente, en momentos que en Argentina apareció su último libro titulado “La aventura de comer”
El dibujante explicó que esta nueva obra suya “no habla sobre el arte culinario, no es livianita”. “Se trata de un texto con trasfondo político y social, como todo lo que yo hago. Siempre he asociado al restaurante con un hecho político porque en éste se repite un poco lo que sucede en los países. La gente quiere comer y en el restaurante el cocinero y los camareros, que vendrían a ser el gobierno, le dan lo que ellos quieren y cuando quieren. Y encima hay que pagarles”. Está claro, Quino no quiere hablar de cocina, “de cocina la verdad es que no sé nada”.
El autor confiesa que le sigue impresionando la actualidad.
“El diario está fatal, un horror”. También afirma que por estos días, el humor no es una tarea sencilla: “cuando viajé a Cuba les pregunté a los colegas cubanos cómo no había caricaturas de Fidel en ningún lado. Me dijeron que nadie sabía por qué, pero estaba en el ambiente que no se podían hacer.
El día que Fidel llevó a cabo una recepción para el Festival de Cine –al que yo había sido invitado–, cuando lo vi se lo pregunté, y golpeándome con el dedo en el pecho, me dijo: “Tú hazme todas las caricaturas que quieras, pero no me hagas contrarrevolución porque sino tendré que ponerte preso”. Yo me pregunto: ¿qué es contrarrevolución? Creo que por eso nadie se anima”, concluye.
El dibujante dice que, en su carrera, tuvo que dejar de dibujar sobre ciertos temas, aunque no fue por censura o por autocensura, sino por cuestiones más profundas. Recuerda que “antes, parte del humor clásico eran los presos, a partir de que en la Argentina comenzaron a haber presos, desaparecidos y torturados, yo no me animé a tocar el tema”. A pesar de todo, Quino cree que “en la política el ser humano encontrará nuevos materiales para no seguir haciendo los desastres que ha hecho”.