El juez Marcelo Torres Galvez rechazó el planteo de incidente de nulidad del Dr. Fernando Chamorro, abogado del periodista José Acho, en el juicio por calumnias e injurias planteado por Oscar Esperanza «Chaqueño» Palavecino. El juicio a otro periodista salteño se cumplirá este miercoles 19 de setiembre a las 9.30.
El cantante pide prisión para el periodista y un resarcimiento económico de 20 mil pesos, porque considera que se lesionó «su buen nombre y honor» cuando difundió que posee tierras en el Chaco Salteño y haras de caballos peruanos. La causa surgió en el marco de una disputa entre criollos e indígenas sobre las adjudicaciones ilegales que realizó el gobierno de tierras fiscales de los lotes 55 y 14 en el Departamento de Rivadavia.
Oscar Esperanza «Chaqueño» Palavecino insiste con su querella por calumnias e injurias contra el periodista de Salta Libre. El juicio de debate y posterior fallo, se reinicia tras el rechazo del recurso del abogado de la defensa Dr. Fernando Chamorro, quien respaldó y fundamentó -sin resultados positivos- las desproligidades de este proceso, ante un pasado intento frustrado de ser condenado, sin las garantías de defensa y sin haberse cumplido los requisitos legales insoslayables.
La causa penal, que llevan adelante sus abogados el Dr. Marcerlo Arancibia con el patrocinio del Dr. Juan A. Uriburu, se tramita en el Juzgado Correccional y de Garantías Nº 3 a cargo del juez Marcelo Torres Galvez. Esta querella tiene origen en el 2005, después de una investigación periodistica partiendo de una denuncia pública efectuada por Fidelina Díaz, un aindígena wichi de Santa Victoria Este, ante la Defensoría del Pueblo de la Nación. De esta forma se revelaba a la prensa sobre la angustiosa situación que atravesaban los aborígenes del Chaco Salteño por el alambrado y la ocupación de sus tierras de los lotes 55 y 14.
Tras una serie de notas de nuestro periodista José Acho realizadas en base a una investigación con múltiples fuentes, trabajo de archivo y un viaje al lote 14 y 55 en el que se recogieron -durante dos días- testimonios registrados en cintas magnetofónicas y de video que contienen declaraciones de caciques y pobladores de la zona, el cantante inició una querella.
Teoría de «real malicia»
Desde su iniciación el proceso el abogado de la defensa demostró una serie de desproligidades que afectaron la garantías constitucionales con la falta de apertura de prueba, y la privación de representante letrado. Tampoco hubo una intimación correcta para su nombramiento, ni término decretado para la prueba. Se decretó unilateralmente la rebeldía del imputado, pero no se la notificaron a su domicilio correcto. Ante esta serie de anomalías la defensa formuló un pedido de declaración de nulidad que fue rechazado por el juez Torres Galvez.
Dentro del proceso judicial, que se reiniciará el 19 de Setiembre del corriente, será presentada la documentación respaldatoria de la investigación periodística y los testigos que probarán la inexitencia de «real malicia» como ensaya la querella, sino el debido «interés público», ya que las publicaciones están basadas en reportajes del diario nacional «El Clarin», de fecha 27/05/02, donde el Sr. Lucio Rojas el propio tío del Chaqueño Palavecino, expresa: «a pesar de la fama cuando está en Salta, llega a su finca de Santa Victoria Este, donde cria caballos. El Chaqueño es mi vecino. La finca de al lado es suya», sostuvo.
Las notas en cuestión, una de ellas titulada «Chaco Mio» con la entrevista de El Clarin y la otra con la confirmación de que el Chaqueño posee tierras de boca del cacique coordinador Francisco Pérez de la Fundación Lakha Honhat, el cantante se considera injuriado y calumniado por el periodista José Acho.
Mensajes de advertencia
En el medio de este irregular proceso, el periodista recibió varios mensajes con advertencias para que este medio (Salta Libre) no continue con la difusión periodística referida a su persona y a sus intereses particulares, además de las injurias proferidas en los medios oficialistas por el abogado del querellante (Dr. Arancibia), contra el periodista, se registraron amenazas transmitidas por terceros (relacionados al ámbito folclórico) contra la integridad física del autor de las notas.
Con este nuevo caso en Salta contra la prensa libre, la justicia adicta al poder de turno, se propone castigar el trabajo periodistico con amenazas o querellas y condenas ejemplificadoras en un ámbito judicial que mantiene resabios autoritarios de la dictadura usados para acotar la libertad de expresión.
Desde Salta Libre se aceptan las responsabilidades devenidas de nuestra labor de informar y opinar, y estamos prestos a acudir a cuanto tribunal o magistrado de la provincia así lo requiera. Lo que no se cepta es esa práctica de la defensa, y del endeble sistema judicial salteño, que como en las peores épocas de la dictadura, envíó hace unos meses una patrulla policial acuda a las 5 de la madrugada -todavía bajo el manto de una oscuridad invernal- al domicilio de un trabajador de prensa para pretender sacarlo de su hogar en un acto ilegal, sin la correspondiente orden escrita de un juez ni citación judicial previa.
En tanto la prensa «oficial» (AM-840) que vive de espaldas a la realidad social y a las necesidades reales de la gente, desinforma e injuria aviesamente al periodista de Salta Libre, difundiendo a toda la provincia que José Acho encontraba «prófugo» y con «orden de captura», cuando en ese preciso momento se encontraba en un café de la calle Mitre, frente a la Plaza 9 de Julio.