Esta es la política policial de Gustavo Sáenz en Salta. Represión y armado de causas judiciales en los barrios obreros y asentamientos, represión contra vendedores ambulantes y artistas callejeros, represión contra trabajadores que luchan por trabajo, como los remiseros que siguen presos.
La policía de Sáenz y su “ministro de seguridad” Juan Manuel Pulleiro acaba de sacarle el ojo de un balazo de goma a un muchacho en otro desalojo en la zona norte, en las orillas del río.
Así, en un lapso de días, la policía de Sáenz, que sale en los anuncios propagandísticos con un barbijo y un cartel que dice “Salta responsable”, le va sacando los ojos a tres personas, un joven de Ballivián, un hombre de Finca Independencia y ahora un asentado que estaba con su bebé en brazos.
Tres hombres pobres, por supuesto, porque ese es el trato que este gobierno le suministra a los sectores más vulnerables de la población.
Represión y armado de causas judiciales en los barrios obreros y asentamientos, represión contra vendedores ambulantes y artistas callejeros, represión contra trabajadores que luchan por trabajo, como los remiseros que siguen presos.
Es la misma política de Juan Carlos Romero y Juan Manuel Urtubey, la misma que, con el pretexto de la pandemia, se está aplicando en todo el país, donde los crímenes y abusos policiales aumentan día por día.
Sólo que Sáenz ha perfeccionado el método y ahora la policía ya no dispara a la espalda o las piernas, ahora “los agentes del orden” disparan a quemarropa y a la cara y alegremente le sacan los ojos a la gente.
Total, ellos saben muy bien que el gobierno y los legisladores oficialistas que se han pasado literalmente por el occipucio todo el cúmulo de denuncias y presentaciones judiciales contra los abusos policiales y que han convertido en ley el decreto represivo 255 les garantizan impunidad.
Por esto decimos que es la policía la que tortura y dispara, pero que son ellos, estos personajes que se sientan cómodamente en sus sillones, los verdaderos autores de estas aberraciones.
Y sostenemos que el gobernador Gustavo Sáenz, al que alguno los medios locales publicitan como “el gobernador con mejor imagen” , y sus funcionarios y sus legisladores son los responsables absolutos de que Adrián Mercado, de 22 años, Ariel Aguirre, de 45 años, y Carlos Johnatan Ávalos, de 24 años, hayan quedado lisiados de por vida.
Raquel Adet
Asociación por los Derechos Humanos “Coca Gallardo”.