(Material actualizado 10.30 AM) Bajo las ordenes del Secretario de Suguridad de la Provincia Gustavo Ferraris y del Comisario Gilberto Pereira, en contra de una orden del juez que no hizo lugar al desalojo, casi medio millar de efectivos de la Infantería de la Policía de Salta, desde las 6 de la mañana desalojan compulsivamente a unos 120 familias de un asentamiento de la zona Norte de Salta. Ante la desesperación de los vecinos, los efectivos desarman viviendas precarias del asentamiento conocido como Bº San Expedito. La policía golpea, reprime con balas de goma, detiene a padres de familia y mujeres embarazadas los que oponen resistencia. Los efectivos también agredieron a un diputado y a una concejal que intercedían por los vecinos en los incidentes.
“No me van a sacar, no me voy a ir. Nadie me saca de acá, me prendo fuego, soy sola con mis cuatro hijos, no tengo donde irme”, lloraba a los gritos una mujer por una radio, tras soportar la destrucción de su precaria vivienda.
Por el delito de usurpación, que es un delito continuo y porque los vecinos están ocupando terrenos que no correponden” el Comisario Gilberto Pereira hizo efectivo el desalojo por orden del Secretario de Seguridad Gustavo Ferraris. Mediante el uso de la violencia a unos 120 familias del asentamiento conocido como Bº San Expedido, son obligadas a dejar los terrenos. Se detuvo a más de una decena de personas entre mayores y mehores y se se registraron heridos por los abusos policiales.
Sin existir una orden judicial de desalojo, desde la madrugada de hoy la Infantería de Policía de Salta, sorprendió a los vecinos que estaba durmiendo este momento utilizando la fuerza para el desalojo, contra los vecinos que se resistieron.
“A los vecinos se les notificó verbalmente”, señaló el Comisario, quien también dijo desconocer la orden del juez Marcelo Torres Galvez, dictada ayer en el que expresaba que no hacía lugar a la media de desalojo compulsivo”.
“Desconozco esa medida tomada por el juez, a nosotros no nos informaron nada, y se está desalojando a la gente para resguardar la salud de la población por el derrame de líquidos cloacales de la zona”, se justificó.
En tanto el comisario dialogaba con laprensa, la infanteria cometía contra las familias que no querían ser desalojadas todo tipo de excesos de violencia contra padres, mujeres, niños, ancianos, que intentaban impedir la destrucción de sus viviendas construidas con lonas, chapas y postes.
Desalojo en la madrugada
“Se adoptó esta mediada a las 6 de la manana porque es un horario adecuado para trabajar y la decisión está tomada y las personas se tienen que ir”, subrayó el Comisario Pereira.
El diputado Claudio del Pla y la concejal Critina Fofani, del Partido del Obrero fueron golpeados, por interceder en los abusos policiales. Los legisladores en reiteradas ocasiones habían solicitado la suspensión del desalojo de los vecinos de San Expedito.
El gobierno ni la Municipalidad no les dieron una solución alternativa de adjudicar otros terrenos a las 120 familias que los han ocupado e integrarlas a un plan de preservación de la reserva natural de usos múltiples.
El déficit habitacional en la provincia alcanza las 35.000 viviendas, según un informe una comisión de la legislatura.