La Justicia Federal de Córdoba tiene casi la certeza de que dio con los restos del joven metanense Luis Agustín Santillán Zevi, quien estaba desaparecido desde el 6 de diciembre de 1975, cuando fue secuestrado, junto a otros tres jóvenes, todos estudiantes de la Facultad de Medicina, en Córdoba.
La información fue dada por el Juzgado Federal Nº 3, al confirmar la identificación de tres muestras óseas halladas el año pasado en los hornos cercanos al Centro Clandestino de Detención La perla. El Juzgado precisó que fueron identificados los estudiantes Lila Rosa Gómez Granja, Ricardo Saibene y Alfredo Felipe Sinópoli.
Junto a estos restos se habían encontrado los de una cuarta pesaron, cuyos datos genéticos no coincidieron con ninguna de las muestras de familiares que tiene el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), pero para el tribunal existen firmes sospechas de que se trata de Santillán Zevi porque los jóvenes fueron detenidos en el mismo operativo, cuando se encontraban en el Parque Sarmiento.
Los familiares de Santillán Zevi no habían aportado muestras genéticas, pero se supo que ya fueron contactados por los investigadores y este trámite se hará en breve. Así lo confirmó en su cuenta de Facebook una sobrina de Santillán, Ariela Santillán Arias, quien se manifestó profundamente emocionada: “El día 18 nuestras vidas han cambiado por completo, es difícil explicar lo que uno siente. Sí, se comunicaron conmigo antropólogos, jueces, con esta noticia”.
Santillán Arias sostuvo que en su familia tienen “toda la mezcla de emociones”. “Después de casi 40 años nuestra historia llega al punto final, esperando reencontrarnos con él, solo les pido que recen para que así él descanse en paz”, rogó.
Santillán Zevi nació en Metán, el 29 de octubre de 1948. Tras su secuestro, su madre, Blanca Violeta Zevi de Santillán, recorrió despachos de Córdoba tratando de dar con su hijo: hizo una denuncia en la Delegación Córdoba de la Policía Federal y en la Central de la Policía provincial, presentó un recurso de hábeas corpus, elevó notas a Ministerio del Interior, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la ONU, la Iglesia Católica y organismos de derechos humanos. En esas presentaciones contó que tras el secuestro “las personas que lo detuvieron, y en el mismo auto en que fue levantado, allanaron el domicilio de mi hijo” en el barrio Altos de Villa Cabrera, en la ciudad de Córdoba.
Santillán Zevi, al que llamaban “Lucho”, militaba en la Juventud Universitaria Peronista (JUP).
- Informe: Elena Corvalán