A 24 días de entregar su mando siguen los palos policiales a la pobreza tan temida por el aun gobernador de Salta. Para los sin tierra, los sectores más empobrecidos de las barrios salteños el 10 de diciembre parece no llegar nunca. Un inoperante funcionario y un expedito juez que responden a Juan Carlos Romero habrían generaron la disputa entre unas 120 familias pobres del asentamiento Divino Niño Jesús y del Barrio Luján, lo que generó la violenta intervención de casi un centenar de uniformados, entre infantería y policías, quienes reprimieron con palos y balas de gomas a mujeres embarazadas, ancianos y niños.
Un grupo de ocupantes de las tierras fiscales fueron apaleados por la policía tras intentar impedir esta mañana que otros vecinos del barrio Luján, ocupen sus tierras por orden del funcionario de Romero, Héctor Aleksandrowicz director del Programa Familia Propietaria. Y la represión no se hizo esperar. La violenta infantería volvió a la acción. Reprimió sin piedad con palos y balas de gomas a mujeres embarazadas, niños, ancianos. El cuestionado juez romerista Héctor Martínez, habría dado la orden.
El personal uniformado de Infantería disparó balas de goma y detuvo a varias vecinas del asentamiento Niño Jesús. Una de ellas Cintia Guanca y a cuatro personas más. Nadie de los que estaban esta mañana en la tierra prometida por un funcionario romerista, se salvó de la represión policial, ni los menores ni las embarazadas.
Ante esta situación la gente solicitaba a los gritos que el gobernador electo Juan Manuel Urtubey se haga presente en el lugar para solucionar el conflicto. Nuevamente los enfrentamientos de pobres contra pobres por las tierras, fue protagonista de una mañana negra en las postrimerías de un gobierno autoritario e impiadoso con los sectores más empobrecidos de Salta.
Un grupo de familias llegó al asentamiento con la intención de ocupar esos terrenos, pero la zona tiene un vallado policial y se instalaron dos camiones de Infantería. Antes de iniciarse la represión policial, Cintia Guanca, aseguró que todas las familias necesitan de una solución, tanto los vecinos del asentamiento Divino Niño Jesús como los de Barrio Luján.
Ni la intermediación del Padre Pagano de la parroquia del barrio sirvió para frenar el conflicto, todo lo contrario «fue totalmente inútil, porque dio pie a este enfrentamiento, generando un conflicto social”, sostuvo Guanca.
Vecinos Vs. Vecinos
“Son una ratas que antes de irse quieren dejar la ciudad bien podrida”, gritó la vecina de apellido Guanca. Los vecinos del asentamiento del Barrio Luján tampoco tuvieron la culpa del enfrentamiento. Ellos recibieron la orden del titular del Programa Familia Propietaria para instalarse en los terrenos que ocupan los residentes de Divino Niño Jesús. Esto provocó el pleito y la posterior represión.
La vecina Cintia Guanca del asentamiento Divino Niño Jesús, denunció que el comisario a cargo del operativo la amenazó con detenerla si no cumplían la orden de abandonar el lugar.”Es totalmente injusto lo que el gobierno está haciendo, porque está derramando más sangre, pero nosotros vamos a seguir con nuestra manifestación”, sentenció la mujer.
“Los funcionarios del gobierno, son ratas que antes de irse quieren dejar la ciudad bien podrida”, acusó Guanca, entre sollozos.
Una mamá indicó que los vecinos del barrio Luján, llegaron a un acuerdo con el titular de Familia Propietaria y posteriormente las tierras fueron adjudicadas en agosto, pero le solicitaron, al funcionario, tiempo para el traslado de las 66 familias. “Nosotros lucharemos hasta las últimas consecuencias”, anunció la mujer, al ser consultada sobre la instalación en esas codiciadas tierras, cuando se retire la policía.
el titular de dicho programa, Héctor Aleksandrowicz habría ordenado entregar el barrio con los servicios básicos y donde además se construiría una capilla y una comisaría, cuyo espacio ya estaría destinados y serían de 10 x 20 metros.
En tanto el sacerdote del barrio Luján, el padre Pagano afirmó que el terreno destinado para la construcción de la capilla ya está delimitado, al igual que el predio para el salón comunitario.
En ese escenario barrial Blanca “Nenina” Lezcano, integrante de la Red de Derechos Humanos aclaró que los vecinos de la comunidad de Luján tienen dispuestos 72 lotes para 66 familias, “me sorprende que un grupo de cristianos estén refugiados detrás de la policía, viendo como golpean a los otros pobres”, expresó.
“Aquí no hay ningún funcionario ni electo ni nada, y no se sabe que es lo que va a pasar cuando llegue la noche. No se puede creer la actitud y los comentarios de la gente de Luján para con las demás personas”, enfatizó.
- Fuente Agencia DDN y FM Noticias.
